La retracción de las aletas suele ser consecuencia de lo que los cirujanos llamamos divergencia de alares. ¿Qué significa ésto? Para entenderlo mejor tenemos que entender que los alares de nuestra nariz son como una especia de gaviotas con sus alas. Digamos que una paciente con divergencia de alares lo que tendrá es sus gaviotas con un déficit de plumas en la parte más baja de sus alas y en consecuencia unas alas más finas. Lo mismo ocurre en una nariz, serán alares con menos consistencia, con cartílagos más finos y estrechos y efectivamente darán menos soporte.
¿Es importante diagnosticar esto antes de la rinoplastia?
Este déficit de soporte genera una “retracción” de la piel hacia arriba. En ocasiones, esta retracción es muy sutil pero esto no quiere decir que no sea importante, aún lo es más porque si pasa desapercibido tras una rinoplastia puede exacerbarse haciéndose más evidente que antes de la cirugía.
¿Cómo se soluciona esta deformidad? ¿Injertos?
Solucionar esto requiere del uso de cartílagos a modo de injertos. Los cartílagos se obtienen del tabique para que no haya riesgo de rechazo al ser propios. Estos injertos se utilizarán a modo de soporte para la zona más inferior de los cartílagos alares y por ello reciben el nombre de injertos de soporte de alares, lateral crural strut grafts o injertos de Gunter (cirujano que los describió).
A continuación os dejo dos fotos intraoperatorias de cómo es este injerto y del resultado inmediato que se obtiene consiguiéndose en el lado empleado un descenso de 2 mm de la aletas, posteriormente se realizará en el otro lado. Son fotos intraoperatorias que pueden herir tu sensibilidad, tenlo en cuenta.